El Puntero

En momentos en los que la sociedad se ve a diario atacada y flagelada por problemas de nivel político, económico, y mismo, social. Donde la pobreza y la marginalidad azotan el país, surge El Puntero, un unitario que llega para quedarse, y que pisa fuerte, decidido a cachetear el estado actual de la Argentina. En esta historia, el protagonista, Pablo Aldo Perotti (Julio Chávez) o más conocido como El Gitano, es un puntero político que conoce como nadie su pueblo, y tiene en la palma de sus manos, los votos de los diez mil habitantes de ese sitio. Debe afrontar diariamente sus problemas económicos, de vivienda, entre otros, y para esto, decide entrometerse en la corrupción política, y todos los manejos oscuros que ésta conlleva. Para variar, su vida a nivel amoroso tampoco es envidiable, ya que por haberse involucrado con la política, se divorcia de su esposa Clarita (Gabriela Toscano), una ex funcionaria comunal, que conoció cuando para él, la política era tan solo un tema más de charlas de barrio, y que no avalaba en lo más mínimo los manejos que el Gitano estaba llevando a cabo con ese tema. Pablo Perotti, lucha diariamente por ganar y renovar la confianza del intendente local, Iñiguez (Carlos Moreno) y para lograr sus arduas tareas, cuenta ciegamente con dos personas fundamentales en su trabajo: sus amigos Levante (Luis Luque), un hombre solterón, adicto al juego, aunque muy fiel amigo. Y Lombardo (Rodrigo de la Serna), un hombre de edad corta que tiene a cargo los trabajos más oscuros e ilegales, es quien se encarga de repartir la droga entre la gente del pueblo, y es barrabrava. La principal meta del Gitano, es llegar a ser el intendente de su pueblo, por lo cual deberá luchar mucho, ya que Iñiguez no piensa dejar la intendencia tan fácilmente. De todos modos el Gitano no duda que “su gente” lo apoyará, pero sabiendo que es una tarea dura, deberá enfrentarse a enemigos, y a varios obstáculos.